Quizás pienses que para tener un buen descanso solamente es preciso tener sueño y un buen colchón: ¡te equivocas! Y mucho. Muchas cosas pueden influir increíblemente en la calidad de tu descanso y hay ciertos aspectos en la decoración de tu habitación que deberías tener muy en cuenta, tienen más importancia de la que crees. ¡Toma nota!
Por supuesto que hay temas claves para que descanses bien: que no haya ruidos excesivos durante la noche, que la cama o el sofá cama donde duermas sea de calidad, que no haya demasiado iluminación, que la cama donde duermas sea lo suficientemente espaciosa, la calidad de tu almohada… pero aún hay más. ¿Cómo tienes elegida la decoración de tu casa? ¡deberías replanteártelo!
Un aspecto clave es el tema de la pintura. Las habitaciones con colores cálidos son más propensas a favorecer un correcto descanso. Colores crema o pastel son más beneficiosos que, por ejemplo, colores impactantes y muy cargados. El blanco por ejemplo es un color neutro que siempre debes tener en cuenta.
También influye y mucho cómo decores tu habitación. Intensa usar una decoración poco sobrecargada, más vale que sobre que qué falte. Con pocos pero bonitos cuadros antes que multitud de posters, fotografías, cuadros, estantes… que están repercutiendo y para mal en el feng shui de tu descanso. ¿Habías caído en eso?
Otro punto importante que demuestra cómo una buena decoración puede condicionar un buen descanso es aquella que tiene que ver con los muebles que elijamos para decorarla. Dentro de nuestras posibilidades, no debemos porqué optar por un mobiliario ni caro ni recargado. Además somos conscientes de que siempre tenemos limitaciones de espacio en nuestra habitación así que los muebles sencillos incluso minimalistas son un plus para nuestro descanso.
Aquellos vintage o demasiado complejos pasaron a la historia. Y algo similar ocurre con la ropa de cama. Y es que debemos optar por una cama que nos apetezca utilizar. Parece un detalle menor pero no: elige edredones o mantas ya no solo de tacto suave, cómodas y prácticas también estéticamente bonitas donde te apetezca meterte y descansar.
Recuerda aprovechar la luz natural en todo momento y que los muebles y la decoración que elijas deben tener este detalle como imprescindible a la hora de colocar los muebles. No los sitúes en contraposición a la luz solar ni la cama bajo de la ventana cara a evitar que las luces de las farolas o de las primeras horas de la mañana te despierten pese a tener cortinas o estores que, se supone, te protegen.
En resumidas cuentas, cuando decoramos una habitación debemos tener en cuenta que importa más cómo lo hagamos que las posibilidades que tenga este espacio en sí mismo. Es decir, qué colores usar, qué tipo de mueble, cómo decoremos las paredes o dónde coloquemos la cama marcarán que tengamos una habitación más o menos propensa al descanso.
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