Comprar un sofá cama de piel otorga elegancia y distinción a nuestro hogar. Al ser de piel va a durarnos más que un sofá cama hecho de cualquier otro material y además no va a absorber olores como lo hacen sofás camas de otros tejidos. A pesar de todo para prolongar su duración es importante que lo cuidemos bien y no cometamos errores irreparables.
Cuando vayamos a limpiar nuestro sofá cama de piel hemos de tener muy en cuenta el producto que vamos a utilizar. Es aconsejable que primero lo utilicemos en una parte no visible de este y de esta forma comprobaremos su efecto. Si empleamos algún producto sin saber su efecto es posible que luego nos encontremos con decoloraciones o grietas. Por otra parte, si apareciera una mancha en nuestro sofá cama hemos de evitar a toda costa frotar el sofá cama para que desaparezca porque esto provocará que se extienda y será peor. En esos casos pondremos encima de la mancha un papel absorbente y esperaremos.
Errores al limpiar el sofá cama de piel
Las manchas de grasa no podemos pretender quitarlas con agua. Será más aconsejable echar polvos de talco en la zona donde se encuentren las manchas y luego usaremos un cepillo y un trapo con un buen quitamanchas.
Bajo ningún motivo debemos secar el sofá-cama con un secador de pelo ya que esto va a deteriorar la piel. Cuando veamos una mínima mancha en nuestro sofá no podemos dejarla y pensar que ya la quitaremos otro día. Hemos de actuar para eliminarla cuanto antes ya que si no nos deshacemos de ella cuanto antes puede que se quede para siempre. Cada vez que vayamos a limpiar nuestro sofá de piel hemos de procurar emplear productos específicos para ello, no vale cualquiera que encontremos en el supermercado.
No podemos dejar que pasen más de 15 días sin haber hecho limpieza del sofá cama porque entonces será más complicado. Evitaremos a toda costa limpiar nuestro sofá con productos químicos y con productos que contengan lejía aunque se haya rebajado en agua.
Otros productos desaconsejables para limpiar un sofá de piel son toallitas de bebé o desmaquillantes. Colocar una funda en nuestro sofá podría ahorrarnos más de un quebradero de cabeza. En el supuesto de que nuestro sofá cama se rasgar existen multitud de trucos que pueden ayudarnos a solucionarlo. Ante todo hemos de cuidar bien nuestro sofá casma para evitar lamentaciones.
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